Jun 1, 2009

The Process

I have learned to enjoy any creative process. Period. Lately, we've been working on developing the concept for Triptico's first music video. It is very interesting to play with the duality of visual and auditive queues. There's a certain harmony that floats in every manifestation of a true effort of communication. Maybe is the little Warhol inside of all of us. From the lens of a camera, to the tip of a brush, everything correlates beautifully and it is great to discover the harmony its harmony. I've learned to enjoy the process maybe even more than the outcome. That has encouraged me to make a product that is transparent of its process. Because in the end, everything's been said already, but the real genius is in the development. The reason why. Teaching how to fish as opposed to... yeah, you know the story.

Feb 5, 2009

Cambios

Todo cambia. Aquellos ojos oscuros tan vibrantes y picaros se reemplazan por la calma de los ojos verdes, semiabiertos. El dinero sale de diferentes lugares, la cantidad varia tambien. El pancito de las 9:30am se ha pasado al medio dia. El carro que auto insultaba su propio nombre se cambia por un lujo mas, una deuda, un dolor de cabeza y otras cuatro ruedas con diferente nombre. Las tareas y los gritos siguen ahi, cambiado de caras, igual de descaradas. Los sonidos eléctricos se cambian por la brisa, el cantar de los pájaros y el vayvén de las olas. Los colores y las sensaciones son rentadas constantemente. El calor asfixiante se evapora y lo sustituye el frío que quema, los abrigos que no te alagan y la brisa que te despierta de bofetada por las mañanas. Todo cambia a mi alrededor. Todo cambia.

De títulos e identidades

Será talvez por la naturaleza nómada de la que hablaban por ahi, en otro blog de mi árbol genealógico que, aunque nunca he sabido que alias usar en los chats de internet, ni las redes sociales, siempre estoy cambiando de identidad. Ahora me dicen diseñador gráfico, talvez con un poco de cinismo, talvez con un poco de ánimo de ponerme a prueba. Y se siente como cuando empecé a tocar el bajo. Que vendi mi Playstation 2 y los mil y un videojuegos que tenia para comprarme un bajo de cinco cuerdas. Simplemente por el hecho de que sentia que cuatro es menos que cinco (probado científicamente) y eso me limitaba en mi enseñanza. Control C + Control V ese argumento para explicar el bajo de seis cuerdas. En fin, recuerdo caminar de vuelta a casa, después de un dia colegial faldas afuera y pantalones caídos y escuché que a alguien se le escapó el nombrete de bajista al referirse a mi. En un principio me senti un tanto culpable. Pensé que no era digno de ese título. Apenas aprendía la naturaleza del instrumento y me estaban poniendo en la misma categoria que Victor Wooten y Michael Manring: bajistas. Fue por ese título talvez, que traté de mejorar en el bajo, y hasta el momento me da un poco de remordimiento cuando usan la palabra. Ahora me cambiaron el titulo, o más bien me añadieron otro. Y aunque aún no esta escrito, ni enmarcado en la pared. Soy un diseñador de contrabando, de profesión precoz. Me sigo adaptando a ese nombrecito que cada vez que lo dicen me hace sonreir un poco mas, siempre cuestionando los papeles sociales y la función que este tiene en la identidad humana. La importancia de la familiaridad y la aceptación. El conformismo. El enemigo y el inevitable. Claro esta que la ilusión de grandeza se aplasta al terminar mi obra laboral: una tarjeta de negocios en Times New Roman, amarillo, con 16 puntos de tamaño, una foto del dueño en la esquina y una sonrisa y un "asi está bien" del cliente que me respira al hombro mientras me desdiseña su identidad.

Diario

Desde niño he querido tener un diario. Un cuaderno de esos bien genericos, que solo tengan mi nombre en la portada en una letra sin cuidado pero perfecta en su informalidad. El objetivo de este diario seria, solamente el de poder bailar con la melancolia varios... no, muchos años despues. Recordar las pequeñeces del dia a dia que embellecen la vida. Preguntarme a mi mismo ¿qué pasó con esos años? Y encontrar respuestas en mis decisions que han dado fruto a mi presente que, aunque un poco discordante a mis predicciones de adolescente, le da de comer a mi pseudo ama gemela y mi niña con la que deberia pasar mas tiempo. Qué bonito seria sentarse una tarde, con la iluminación perfecta a regocijarse en el recuerdo. En aquello que nos hace humanos, que nos brinda el orgullo. La memoria. El don mas preciado que tiene el hombre. Y en mi cuenta quedan varios diarios sin terminar, intentos catárticos que resultan en llantos y ausencia de lo bonito. Intenté un par de veces como ejercicio de gramática, me forzaba a escribir todos los dias, aún cuando el dia no ameritaba palabras. Después de una semana, suplanté la escritura diaria por la pornografia o alguna otra maravilla adolescente y el cuaderno fue victima del desempeño. Ahi quedó, con sus solitarias palabras, que tan siquiera contaban con el sentido de compañia. Unos años después volvi a intentar lo de mis memorias, pero mi letra me mata. La imperfección de los trazos, y mi incapacidad de poder escribir sobre la rayita que marca el renglón me sulfura. Pensaba en un yo mayor, una persona exitosa, maestro de lo estético, en aquella tarde donde la luz y todo es perfecto, sentarme en una silla vieja, que suene al acomodarse y al abrir ese cuaderno obviar las palabras por el desastre caligráfico siendo expuesto. No podria pasar de la primera página.
Asi que me hice este blog, imaduro al principio, extra personal en el medio e inconsistente al final. No es una descarga ni me invita bailes melancólicos. Tampoco me dice como escribía en ese entonces, si habia escogido cursiva o script. Si pude combatir la necesidad de la letra de saltar por la linea del renglón. La forma de escribir las erres. La T mayúscula, que nunca supe como escribirla en cursiva. En este blog, en cambio, recibo los ojos de miles de millones psicoanalistas que callados me dan su veredicto. Aqui cambio la letra cada vez que me aburro. El color y el orden de las cosas cambia casi que con una idea nueva y la inconsistencia sigue siendo clave en el desarrollo del mismo.

Dec 31, 2008

Leer

Hace tiempo ya que no me leo un libro. Y no es que yo acostumbre a leer mucho. Porque no. Si le preguntas a fulanito te dirá que: "Gabriel? Leyendo? Si ese muchacho lo que hace es burlarse de todo el mundo y ser pesado como no hay otro!" Pero hubo (digo "hubo" en vez de "hubieron" por las miles de veces que me corrigió mi maestra Lilly en el quinto grado por preguntarle despues de un examen: "¿hubieron cienes?" esperando que yo fuera uno de ellos, a cual pregunta ella respondia con un frio "hubo, hubo cienes") tiempos en que la soledad me forzó a leer libros. No muchos. Pero libros al fin. Me lei El Reino de Este Mundo, uno que otro de Garcia Marquez y hasta la mitad de El Castillo de Kafka. Mi lectura fue un refugio de mis alrededores (no se si sabes que mi historia es muy trágica: de niño me mude a infinitos lugares que me impidieron de formar amistades a largo plazo. Pero por eso lloramos los domingos). Lei hasta en lenguajes desconocidos, uno que otro libro en ingles: The Perks of being a Wallflower, The Picture of Dorian Gray y hasta The Catcher in the Rye. Leía todos los dias. Leía todo el dia. Entre clase y clase, caminando por los corredores de la secundaria, guiandome por los tropezones entre hombros desconocidos. Leía en clase. En sermones. En los recreos. Leía entre bocados. Leía de ida y de vuelta.
Poco a poco la lectura fue reemplazada por una bicicleta, un par de audífonos y la ilusion de dos o tres amigos; o por lo menos caras con quien intercambiar palabras. Los libros se guardaron en gavetas junto con la costumbre de leerlos y el polvo se ha convertido en olvido. Ahora no encuentro tiempo para leer, aunque se que deberia. Que es una lastima. Que la lectura me lleva a lugares infinitamente enriquecedores. Pues, yo te podria discutir que mi cubiculo me enriquece de mil maneras. Que soy mas rico que nunca. Pero en un final, yo podria discutir muchas cosas.

Jugar Vivir

Y de la nada llega a ti. Esa repentina realizacion. Esa destructora de nuestra comoda ignorancia. La que te aplasta los sueños, te agarra de los pies y te atornilla al piso para meterte los dedos entre la tierra y con sutileza, alejar las nubes cada vez un poco mas de tu cabeza.

Respira profundo. Date un par de bofetadas y en el proceso agarrate de la tercera persona. Del qué diran. Simplificate en terminos descriptivos. En dedos indices en direcciones infinitas que penetran pechos. Dividete en mil personalidades, en los miles de "yo's" de los que te haz apropiado. El que finje la sonrisa. El que se acaricia la barbilla antes de decir algo profundo. El que se rasca la cabeza antes de resolver un problema. El que se ajusta los anteojos oscuros, y saca el codo por la ventana mientras maneja.

Y al final, que queda?
Una excusa mediocre de individualidad. Una intento fallido de lo extraordinario.

Rapidamente, te vistes de mascaras y olvidas la imagen en el espejo.
Es hora de jugar vivir.

Dec 22, 2008

Life and Death

Life is a different place in the presence of death. And we arm ourselves with alarms, seat belts, guns, bulletproof vests, life vests, jobs, anything that draws a bigger line in between both worlds.

3:13pm. The eyelids draw semi open when her hands announce my awakening. I compare my productivity with my back pain and decide to give it try: let's start another day. A day that may be the end of days. Or may as well be another pile of dust that we hide under the carpet.

The keys in the ignition, the sunglasses on, and like the usual pocket slap, I look to my side to check for her. There she is. Patiently awaiting, checking every possible check box in the list. All of the above.

We decide to take a shortcut. Instead of moving inches per hour, we decide to take the side road. Our time is precious. Our time is above everyone else's time. Our time cannot be interrupted.

Our time was interrupted by the front end of a white beast that with its roar created mayhem. Destroyed my carriage and made other bleed. We morbidly documented the happening while inviting others to observe, slowly feeding by the tears. To discover one another as participants of what could've been the end of...

A guilty game of so much rage amongst us. The illusionist cloud of entertainment that drove miles and miles to embrace the feeling of belonging. What it is to paint your face red and black, hang a couple of flags in your car, followed by a sticker or two in the back bumper and, if you feel crazy, hang three or four bead necklaces on the rear mirror that, like a suicidal teenager with too much eye liner, decides to put make up on its last day of living.

A fantastic Christmas afternoon. Surrounded by the marketing strategies that were carefully planned out by corporate suits. Those that dictate our life. Our goals. Our desire to strive. Inundated by the impatient red and green that forces a smile upon your face, a dollar sign on your pupils, and the obsessive compulsive desire to fill the bottom of the tree with wrapped boxes misappropriating love.

In the end, the ending was disappointingly happy. Bones are still to be broken and blood has yet to be spilled. We feed the paranoia of the everyday with more headlining news, more reasons to stay within our safely secured house windows. Grab on to your belongings. Your 36 inch monitor that someone might break into your house for. Your two thousand dollars computer that feeds you with artificial love, the only palpable kind. Your sixteen year old son that is your biggest pride, your most priced possession: a breathing one. The that can actually respond you with words how amazing and giving you are by blessing the world with its presence. The biggest ego boost known to mankind.

God forbid, death takes this all away from us.

Dec 11, 2008

Diciembre Dos Mil Ocho

Los dias de diciembre en el dos mil ocho ya no son como antes. Ya no son soleados con un toque de brisa. En su lugar, me despierto con un clima nublado, un perro lamiendome la axila y una alarma desesperada por un poco de atencion. Estos dias de diciembre no son melancolicos. Aunque la lluvia te pide un suspiro. Aunque las nubes te cierren los ojos. Nada.
En estos dias de diciembre, la normalidad es extraordinaria. El carro es el mismo, esperandome fielmente en la entrada de la casa, con su estampa que le demuestra los años, la sabiduria y experiencia de sus once lunas.
El perro, que es nuevo en este diciembre; perezosamente mueve su espalda entre mis dos almohadas y y abre la boca de una manera inhumana. Yo le balboseo tres o cuatro ridiculeces, pretediendo que es un bebe, el me mira indiferente y se prepara para el derroche de adrenalina que es el abrir la puerta. Rapidamente se pone de pie, bueno, de cuatro patas que es el equivalente a "de pie" en terminos caninos. Y apenas dejo entrar un poco de luz a mi cuarto sin ventanas sale este cuadrupedo desesperado para encontrar detras de el umbral, una casa semi-iluminada por la falta de otros diciembres y la excesa presencia de este diciembre dos mil ocho.
El despertar es un poco mundano. Me sacudo el estres de los ombros y trato de eliminar cualquier señal de que son las tres de la tarde y deberia estar en el trabajo. Con el dedo índice me deshago de las legañas, pero no todas, ahi quedaron una o dos que sobreviviran por un par de horas mas. Arrastro mis pies hasta el baño, me miro en el espejo e imediatamente me molesta lo despeinado de mi peinado. En este momento no estoy para vanidades asi que acerco mis dos manos al lavabo por uno... dos... tres segundos y con ese mini charco de agua y cuidadosamente acomodo mi pelo para que no parezca intencional. Esta mañana no me pude escapar de esa seccion en la parte de atras de mi cabeza que se resiste a mis dedos que con firmeza tratan de opacar su presencia, deciden pararse de la manera mas descarada delantandome asi la pereza.
Despues de secarme la cara, limpiarme los dientes y convencerme de una apariencia presentable, viene la ropa. Ese ritual todos lo conocemos. Me chequeo los bolsillos del pantalon: el celular en la derecha, las llaves en la izquierda y la billetera atras.
Y asi me decido empezar el dia, con el estomago vacio y unos hombros listos para cargar un poco mas de estres Una apariencia semi-presentable (si no fuese por ese rebelde parche de pelo que no se quiere acomodar) y una disposicion de diciembre. Deseando un poquito mas de sol y huyendole al frio que no es tan frio como el norte, pero es mas frio que el sur. Rodeado por un diciembre diferente. Un diciembre que espera y promete otro diciembres mejores. Y no es que quiera menospreciar este diciembre. Es el mejor diciembre que existe. Te amo, diciembre. Talvez sea que no estoy acostumbrado a tu bondad e incondicionalidad. Por ahora la acepto y te devuelvo todo de mi a cambio; pero muy cuidadoso. Porque hay diciembres, y hay diciembres.

Dec 9, 2008

En pie de paz



Los hijos de Ismael - En pie de paz
de venta [aqui]

Notes of an Insomniac

by Anabel Basualdo

I walk around a depopulated world, at first I wrestle with the idea, but eventually I cease to fight. I start to believe that maybe fantasy won the battle against cognition and now fables are more powerful than history. I wonder if dreams have more strength than facts? Is laughter really the best medicine? or whether love really endures all things? Are pictures really worth a thousand words? Is seeing really believing?

Once I feel defeated I decided to sit down with insomnia as an enduring companion, she becomes my accomplice, my ally, she is no longer an accessory that i can ware out on a saturday night, she is now my fully devoted advocate.

De nuevo

Cómo empezar?
Como limpiar el polvo y esquivar la telaraña de tal manera que en mi estampa no quede una herida?
Y es que a nadie le gusta leer de lo bonito. Nadie disfruta de la envidia, de la infinita idea del inferior. Porque ahí estas, del otro lado del cero y el uno, con tus dedos en la barbilla, desnudando mis palabras para castigarlas de un latigazo.
Y que hago yo?
Cómo hacer justicia?
En su lugar, hacemos amor. Hacemos decepción y engaño -si, ese el engaño que guardamos en el bolsillo-. Hacemos la vida, la deshacemos y torturamos su cadáver. En el hacer, caminamos en zigzag, sin miedo, pero con mucho miedo. En el andar, abrazamos al olvido y tarareamos nuestras verdades impalpables. Y asi desatamos el monstruo: este personaje que pretendes ser, esa imagen pública que dicta tus acciones, esa falsa percepción de lo genuino.
Pero del otro lado no hay nadie. No hay razon ni contraparte.
Del otro lado, la respuesta que en su silencio se aclara.
Blanca.
Entera.
Palpitando un despertar.

Oct 20, 2008

Call for action

Let's talk about religion.
Let's instigate our beliefs and dig deep inside our "souls" and find meanings.
Let's be controversial.
Let's offend people.
Let's not.
Let's put religion aside.
Let's analyze our ability to analyze ourselves.
Let's sit down and not answer those meaningful questions like "why are we here?, "where did we come from?", "where are we going?".
Let's dim that automatic and comfortable smile on our faces and lose the inhibition to frown.
Let's welcome doubt into our worlds and overwhelm our lives with humility.
Let's question the inexplicable absolute truth fore this is a false stamp of hope.
Let's reject the easy answer and seek the obstacles that brighten the road.
Let's step away from conformity and rise from the mundane.
Let's embrace that which makes us different.